domingo, 20 de diciembre de 2009

CARTA A LOS REYES MAGOS


Queridos Reyes Magos, desde la última vez que os escribí , han pasado muchas cosas, pero supongo que la más importante, y la que desemboca en el resto es que he madurado. Por suerte o desventura ya no veo las cosas como antes, cada vez todo es más difícil y poco a poco empiezo a ver la vida como me están enseñando a verla: de una manera dura y complicada. Ya no es esa vida que tenía con apenas cinco años y todo a mi alrededor relucía y me llamaba la atención. Ahora... ahora ese brillo lo único que hace es cegarme, me daña e intento apartarlo, dándole más valor a las cosas oscuras, a aquellas que carecen de interés para mí. ¿Es bueno crecer? ¿Hacerse mayor? A mí no me parece divertido, cada vez tengo más responsabilidades y entiendo menos la vida... no entiendo a las personas. Me siento débil y deprimido. Me estoy volviendo como ellos... como el resto... Me estoy volviendo loco.
Antes entendía sólo aquello que me hacía feliz, y me bastaba con eso. Ahora cada vez entiendo menos y el deseo de buscar respuesta a algo que conscientemente pienso que jamás encontraré me está consumiendo lentamente. Y es que no entiendo al ser humano, nos pasamos la vida esforzándonos por llegar a conseguir algo: estudiamos y trabajamos. Después enfermamos... y todo para conseguir dinero, dinero que perderemos para recuperar la salud que mediante el trabajo nos ha sido arrebatada.
Y por pensar ansiosamente en el futuro no nos damos cuenta del presente, de las cosas que brillan y no nos ciegan, así que terminamos por no vivir ni el presente ni el futuro.
Luego además vienen problemas añadidos. Este año ha sido la crisis, de la cual sólo he sacado discusiones políticas que no llevan a nada y falsos intentos para solucionar algo que hoy sigue presente. Soy consciente de que hablando de crisis, de algún modo la promuevo, pero lo que no puedo hacer ni mucho menos permitir es callar en la crisis y exaltar en el conformismo. Queda más que sabido que la única crisis que existe, la que nos amenaza a todos constantemente, es aquella llamada locura y que nadie está dispuesto a curar, pues para ello debe reconocerse primero.
Debo recalcar que con locura me refiero a quedarnos de brazos cruzados lamentándonos de nuestras penas mientras miles de niños mueren cada día de hambre, o por enfermedades curables con medicamentos que cuestan menos de la milésima parte de nuestro presupuesto, o de la utilización de sprays de los que podemos prescindir que dañan el medio ambiente, o de la opulencia de los crímenes hacia especies animales con fines estéticos o recreativos para los humanos...

Entonces, por todo esto y por muchas cosas más, sólo puedo pedir un poco de cordura para este mundo, y lo pido antes de que crezca más y me convierta en uno de ellos y sea demasiado tarde.

2 comentarios:

Nuncajamás dijo...

Me apunto a tu petición a los Reyes Magos. Preciosa carta.

Dakozu dijo...

Dos años seguidos pidiendo lo mismo y nada, a lo mejor es cierto eso que dicen de que los Reyes Magos no existen...
Muchas gracias :D